Monday, November 30, 2009

descalzo







Me gusta caminar descalzo.
Me ha gustado siempre.
Nací y me crié en culturas en que la descalcez implicaba la máxima miseria y, dentro de mi estrato social, un ludibrio.

Mucho después viví en países y tiempos en que caminar descalzo era casi corriente o estaba socialmente modelado en lugares y ocasiones.

Durante mucho tiempo este “gusto” o tendencia mía, con otros igualmente “exóticos”, fue un misterio, porque yo no creo que estas peculiaridades de las personas no sean explicables.

Hasta que hubo un momento en que empecé a relacionar, debido a mis estudios de pueblos primitivos y orientales, muchas cosas, entre ellas recuerdos de mi abuela filipina, indonesia y oriental.

Mis gustos excéntricos coincidían con viejas costumbres y usos primitivos. Eran “instintos” o como ahora empezamos a reconocer, “recuerdos genéticos”.
Durante mucho tiempo se ha creído que esos recuerdos genéticos eran los recuerdos de haber vivido en otro tiempo y en otro espacio. Yo no participo de esa teoría, aunque pienso que de alguna manera son transmisiones de INFORMACION de las experiencias de nuestros antecesores.
Creo que estamos muy cerca en la actualidad de empezar a descubrir que no solamente portamos la información genética de nuestras formas corporales, sino también de las experiencias de vida. Lo anterior es precisamente la base del desarrollo humano. Si no hubiese esa misteriosa herencia de aptitudes, nada en nosotros habría avanzado históricamente, seríamos exactamente iguales que el primer Cromagnon, nuestro antecesor.
En consecuencia, no solamente heredamos aptitudes e “inclinaciones” físicas, sino también los recuerdos de las experiencias de vida que nos llevaron a desarrollar esas aptitudes que antiguamente se llamaban instintivas.

Mi abuela me contaba que a pesar de ser hija de una familia burguesa en Manila, gozaba durante las lluvias del monzón escapar a la calle y descalza chapotear en los torrentes que se deslizaban frente a su casa.

Ahora pienso que mis tatarabuelos indonesios hace algo más de cien años caminaban desnudos en las selvas tropicales de las infinitas islas del archipiélago filipino.
Otro rasgo extraño en mis gustos físicos es la necesidad de sol sobre mi cuerpo y aire, lo mismo que una temperatura cálida, siendo así que nací y me crié en un clima continental de temperaturas extremas.
Por el otro lado tengo las influencias árabes de mi abuelo, mucho más lejanas, que me dejaron la añoranza de los desiertos y de la soledad.

Estos rasgos o atracciones inconscientes me han mantenido siempre un tanto alejado de las culturas occidentales en que he vivido, con una sensación mía y de quienes me han rodeado de ser un

obediencia











OBEDIENCIA


La obediencia implica una jerarquización entre las personas o seres vivientes.

La jerarquización parte de una valoración previa en que se determina por alguna razón previa (se dice “a priori”) de una de las partes. El que “manda” es superior y el que obedece, inferior.

La jerarquización implica también una suerte de poder para forzar la obediencia cuando esta no se da en forma voluntaria.

Por parte del “obediente” se da una renuncia a su libertad. La obediencia convierte al que la realiza en una parte, generalmente un instrumento, de quien ordena.

Se ha especulado, especialmente entre los teólogos, por conveniencia doctrinal, que quien obedece voluntariamente “ejercita su libertad” pero esto es un torpe sofisma.

Originalmente la jerarquización-obediencia parte de la necesidad, en ocasiones determinadas. Que se daba en los grupos primitivos en los que existía una igualdad funcional, frente acciones colectiva en que era necesaria la organización para lograr una cierta eficacia.
Así existen muchos datos históricos y culturales en que en la vida normal del grupo social no existía liderazgo y que solamente se elegía este o se daba espontáneamente en momentos de apremio como la caza o la guerra.

Cuando de una cultura milenaria de pueblos cazadores recolectores o pescadores recolectores se pasa a una incipiente cultura ciudadana esos líderes temporales anteriores pasan a ser dirigentes para regularizar la cohesión del grupo. Así se genera una elite de poder que empieza a imponer su jerarquía guerrera, sacerdotal o mercantil inicialmente en provecho del grupo o luego en provecho de SU GRUPO ELITISTA.

El Grupo Elitista será muy semejante a lo que actualmente llamamos “mafias” Está estructurado siempre en forma legal o ilegal sobre el principio:

NOSOTROS SOMOS LOS MEJORES, LOS EEMÁS NO VALEN NADA: PARIAS, SUDRAS, PLEBE… Ellos son nuestras herramientas para alcanzar nuestra propia prosperidad. Lo importante es que nos
OBEDEZCAN
Si no lo hacen nosotros tenemos el Poder y la Fuerza, el Castigo y el Dolor. Así se genera la legalidad o la ilegalidad de penas y castigos.

La jerarquización-obediencia destruyeron la solidaridad cooperativa original entre los seres humanos en que los vínculos solidarios entre el grupo no se daban por motivos altruistas sino porque
TODOS DEPENDIAN DE TODOS.

Tenemos el sueño nosotros los plebeyos, de volver a esa solidaridad primitiva impresa en nuestros recuerdos genéticos, pero hasta el momento han fracasado todas las UTOPIAS, MOVIMIENTOS POLITICOS Y FILOSOFICOS
No solamente han fracasado, sino que ese fracaso ha implicado muerte dolor y lágrimas hasta hoy.
Me pregunto
¿CÓMO SOMOS CAPACES DE CREAR MARAVILLAS TECNOLOGICAS PARA VIAJAR A LAS ESTRELLAS Y NO SOMOS CAPACES DE CREAR PARA NOSOTROS

Friday, November 20, 2009

mujeres











MUJERES DESPIERTEN

A veces en mis reflexiones caigo en la tentación de ser panfletario. Hoy es una de ellas.

Cierto aunque no lo deseo estoy seguro de continuar siendo, emocionalmente, machista.

El machismo me fue inculcado antes de nacer cuando mi madre determinaba el color de las prendas con que me vestiría. Indudablemente:
COLOR PARA MACHOS.
A continuación desde el día siguiente a mi nacimiento se me empezó a adiestrar como macho.
Yo nací desnudo, mi hermana nació desnuda, las ropas que nos colocaron determinaron claramente el papel que tendríamos en la vida:
Yo dominante, ella dominada.

Mujeres madres despierten de una vez:

USTEDES SON LAS TRANSMISORAS Y PERPETUADORAS DEL MACHISMO.

Machismo es, disfrazado, la glorificación de la fuerza bruta para dominar ejercer el Poder que ejercitarán primeramente en ustedes mismas.

¿Quién de ustedes no ha repetido hasta la saciedad:
“No hagas ESO porque no es de hombre”
Aun no comprendo por qué mi madre me decía que mirarme en el espejo no era varonil y a los 81 años me miro con recelo al espejo.

Anoche repasaba la lista de los Derechos Humanos promulgada en1948 y me digo que la mayoría de ellos son incumplidos porque los papás y mamás siguen enseñando lo antiguo como sagrado. Así las mujeres deberán llevar sus pesados velos o tchador hasta los talones, admitirán que sus hijas sean excisadas, declararán que el varón que no se deja barba y afeita la cabeza es poco varonil.

Sunday, November 08, 2009

बूएनोस य bellos






BUENOS Y HERMOSOS


Una joven amiga me escribe refiriéndose a una vejez triste y disminuida de otra persona, que “ella se prepara para obtener una mejor ancianidad”.
Esta reflexión actualizó la reflexión sobre mi propia experiencia.
Hace muchos años conocí a dos ancianos física e intelectualmente activos, especialmente creativos y aventureros. Desde ese momento me dije:
HARÉ TODO LO POSIBLE PARA SER EN MI ANCIANIDAD COMO ELLOS
Creo haberlo conseguido a mi manera, aunque esté consciente de la fragilidad que comporta la edad.
¿Cómo lo he conseguido? Desde luego, sin grandes privaciones a la manera de algunos amigos que siguen dietas o métodos de vida especiales y complicados.

La vieja sabiduría de los griegos clásicos me ha ayudado. Ellos la adquirieron, como navegantes, de sus barcos de remos en que como, más tarde los vikingos eran remeros libres, tanto navegantes como guerreros y comerciantes. Esta vida les enseñó una solidaridad práctica que creó en ellos esa sabiduría que posteriormente aplicarían a todos los aspectos del clasicismo griego:
NADA DEMASIADO
(meden ágan)

TODO CON MESURA
(tó metron)

SER HERMOSOS Y BUENOS
(kalós kai agathós)

Es una sabiduría extraída de la boga solidaria aplicada en:

LA VIDA
EL ARTE
LA FILOSOFIA
LA ORATORIA…

No se trataba de un esquema intelectual, sino vivencial. Lo habían corporeizado, introyectado como se dice ahora.
El que remaba flojo, perjudicaba al resto. El que remaba fuerte, perjudicaba. Lo importante era el ritmo, la medida. Los que lo lograban por su fuerza (kalos) eran buenos (agathos).

Esos barcos de treinta remeros, quince por banda, fueron con los que conquistaron Troya y colonizaron todo el Mediterráneo hasta las Columnas de Hércules (Gibraltar)
eran esbeltos navíos muy semejantes a los

DRAKARES VIKINGOS