Thursday, July 30, 2009

creencias



LAS CREENCIAS




Algo que me choca profundamente en análisis de nuestra vida diaria y social es que en este siglo XXI nuestras relaciones individuales y sociales estén fundamentadas en
CREENCIAS.
La mayoría de la gente no se da cuenta de ello y el resto supone que es algo Normal. Cierto que esto último lo es, si se considera que dentro de nuestra sociedad lo Normal es lo que opina el común de las personas, por descabellado que esto sea.

Pensar que las Creencias son formas de vida inocuas es bastante peligroso
ya que se trata de esquemas fijos que no evolucionan con el tiempo y que nos hacen vivir la Realidad con criterios de hace siglos, incluso de un primitivismo multisecular.

La importancia de las Creencias es tan importante en nuestra vida social que son explotadas por los “astutos” de siempre utilizándolas, o bien creando otras nuevas, como la de medicamentos milagrosos o espiritualidades “nuevas” que en ocasiones son transformaciones de otras tan antiguas como el hilo negro.

¿QUÉ ES UNA CREENCIA?

Obviamente en algo que colectivamente se Cree como cierto y verdadero. Pero la fuerza de una creencia no está en esto sino que quien las enseña, transmite y afirma

LAS IMPONE POR CRITERIO DE AUTORIDAD.

Primariamente las creencias las enseñan y autentifican
LOS PADRES Y MADRES
Generalmente las segundas, ante todo. Creencias religiosas, desde luego, pero otras tan seglares como la manera de vestirse que llamarán Decencia (decet= “lo que conviene).

La Creencia, esto es muy importante, no es nunca científica, sino una afirmación arbitraria que no es nunca comprobable por uno mismo.
Hecho científico es aquel que tiene una explicación y que puede ser repetible. La Creencia, simplemente, se auto autentifica por sí misma o por la autoridad de su creador.
Cuando en los siglos pasados se hablaba por parte de los filósofos de la “creación espontánea” debido a la observación de los charcos de agua, muchos lo creían como absolutamente cierto, porque era la ciencia de su tiempo.

Las Creencias son algo fijo en sí mismas... No evolucionan. Solamente se transmiten a través de siglos y milenios.
La gravedad de ello que, si examinamos nuestra vida diaria, comprobaremos que interpretamos la Realidad de nuestro mundo actual con criterios fundados en Creencias milenarias que hemos aceptado por “criterio de autoridad” como ciertas y que ya no tienen nada que ver con nuestra Realidad actual. La consecuencia es que nuestra orgullosa sociedad se va convirtiendo en forma segura en una sociedad

ESQUIZOFRÉNICA

UN MUNDO DE AUTENTICOS LOCOS
QUE CREEN EN ALGO

EN LO QUE NO CREEN

Thursday, July 02, 2009

लोस cielos

LOS CIELOS


Estamos firmemente convencidos de la “objetividad” de muchas cosas por el simple hecho de que nos fueron “enseñadas” ASI en nuestra más temprana edad. Algunas algo más tardes.

Resulta anormal, cuando se mediata en los fundamentos de nuestra civilización, que ella se estructure en “creencias”. Solamente en eso:
CREENCIAS.
Una creencia no es una Realidad (aunque pueda coincidir, a veces con ella) sino simplemente algo que por CRITERIO DE AUTORIDAD, es decir, porque quienes no las enseñaron tenían autoridad a nuestros ojos en aquel momento, las aceptamos como verdades sobre las que fundamentaremos toda nuestra vida futura y que ensañaremos a nuestra descendencia.

Que esto suceda en nuestro siglo XXI resulta, aun, más extraño.

Esta reflexión me asaltó con fuerza hoy leyendo y reflexionando sobre las diversas creencias que han tenido y tienen algunos grupos humanos sobre la existencia de un Cielo extramundano o celestial.

++++++

Los antiguos germanos soñaban con un Cielo lleno de armas. A ese cielo iban directamente los caídos en la batalla y allí comerían jabalí y beberían cerveza eternamente servidos por las valkirias guerreras celestiales hijas del dios Odín. Nada extraño en pueblos guerreros capaces de detener el Imperio Romano en su expansión.

En la Biblia hay varías versiones del Cielo. La más aburrida lo presenta como un concierto eterno de cantos de alabanza. La más dinámica describe la celestial Jerusalén con murallas de piedras preciosas y calles empedradas en oro. Sueños evidentes de una cultura de comercio donde la división entre pobres y ricos era ya muy fuerte.

El Cielo para los hombres de los desiertos escasos de agua, fascinados por árboles y plantas, escasos de relaciones sexuales, está lleno de fuentes, huertos magníficos y sobre todo de mujeres que ofrecerán un continuo goce ya que su virginidad se renovará en forma automática sin tener que recurrir a los viles cosidos de la tierra.

++++++

Esto que he escrito de memoria, espero poderlo investigar d manera más seria y detenida próximamente citando textos además insertando otras creencias del Paraíso más antiguas, tales como la egipcia, asiria, china etc.

+++++++++++++