EL DIOS BÍBLICO
Para las culturas hipermachista históricas del Oriente Medio de hace 30 siglos generadas por grupos patriarcales de origen pastoril el Dios bíblico era la proyección de su propia concepción de la familia. Un patriarca que tenia el derecho de realizar todos los caprichos y fantasías propias. Más tarde con la creación de las ciudades ese Patriarca seria el rey absoluto.
Esta imagen de la divinidad les satisfacía y les legitimaba en su tiranía absoluta frente a los estratos de su sociedad formada por una pirámide de sacerdotes, comerciantes, agricultores-pastores, muges y esclavos. Siendo estos dos estratos inferiores muy semejantes en estimación y tratamiento (propiedades del varón)
La pregunta fundamental es si hoy, tres milenios más tarde esa imagen patriarcal de Dios nos satisface y si siquiera nos parece aceptable y creíble.
¿Qué representa para nosotros un Dios absolutista, guerrero, atrabiliario, vengativo, racista...? ¿Es para nosotros una imagen representativa de lo que aspiramos? Un sátrapa oriental cuya voluntad es ley sea o no sea racional o contradictoria con lo que el mismo ha dictaminado y, sobre todo ha realizado. ¿Calza con nosotros un Dios que envía a su Hijo a la muerte para autosatisfacerse y redimirse de las ofensas que le han hecho los seres humanos? un Dios que creo lo femenino, el cuerpo humano desnudo, el sexo... y que lo considera pecaminoso y vergonzoso...Un Dios que instáurale sacrificio sangriento, físico y real de animales y que solamente accede debido a la evolución cultural a un sacrificio simbólico de pan y vino pero que representa igualmente carne y sangre y que acepta el masoquismo de sus elegidos (santos y mártires) como algo que le agrada...
¿Qué ser humano no neurótico de la actualidad aceptaría ser semejante a ese Dios?
Las reflexiones anteriores no niegan la posibilidad e un ser Trascendente, lo que rechazan es el antropomorfismo con que se ha revestido el concepto de Dios que es el mismo esquema del que se dio a los dioses paganos tales como Zeus o Apolo..
Uno se pregunta ¿Nos hizo Dios a su imagen y semejanza o bien hicimos a Dios A NUESTRA IMAGEN Y SEMEJANZA?
Tuesday, May 16, 2006
solidaridad
SOLIDARIDAD
Me gustaría poder reflexionar sobre temas filosóficos sin usar términos abstractos o lo menos posible. No consigo hacerlo con frecuencias. En este aspecto envidio bastante al filósofo poeta Nietzsche. Capto intuitivamente aspectos de la realidad que se expresan habitualmente con palabras abstracta que les despojan de su sentido profundo.
SOLIDARIDAD. Es uno de ellos. No es un concepto filosófico sino que describe el fundamento e toda posibilidad de asociación de lo viviente. Siento con fuerza que la destrucción de lo humano dentro de nuestra cultura procede de esa vivencia primordial que es la solidaridad.
En realidad ¿qué queremos expresar con la palabra solidaridad? Pienso que el hecho de una ayuda mutua que no se da por razones de simpatía o conveniencia puntual e un momento, sino porque si yo ayudo al otro, el otro me debe ayudar igualmente. Es una “mano vuelta” como aun persiste en ciertas comunidades pobres, campesina y, a veces, ciudadanas..
Yo he tenido la ocasión de vivir en varias circunstancias de tragedia común: bombardeos, guerra, atentados, un tsunami y terremoto devastador.
En todas estas ocasiones advertí y vivió una especie de quiebre social muy especial. Es como si de repente hubiese caído la separación debida a diferencias de estratos sociales derivados de clases, economía... Parecía como si todos necesitásemos de todos, parecía como sí los vínculos del clan primitivo (por qué no decirlo Tambien: de la “manada primorial”) se recuperasen con inusitada fuerza. En la desgracia común aparecía una energía eufórica un deseo de mutua ayuda en que uno podía ceder pare de lo que hasta ese momento le parecía más necesario para compartirlo con aquel que había perdido todo. Esos instantes se iban diluyendo según el apremio común desaparecía, pero todo s se maravillaban de haberlo sentido y muchos nos preguntábamos por quenseria así siempre.
Me gustaría poder reflexionar sobre temas filosóficos sin usar términos abstractos o lo menos posible. No consigo hacerlo con frecuencias. En este aspecto envidio bastante al filósofo poeta Nietzsche. Capto intuitivamente aspectos de la realidad que se expresan habitualmente con palabras abstracta que les despojan de su sentido profundo.
SOLIDARIDAD. Es uno de ellos. No es un concepto filosófico sino que describe el fundamento e toda posibilidad de asociación de lo viviente. Siento con fuerza que la destrucción de lo humano dentro de nuestra cultura procede de esa vivencia primordial que es la solidaridad.
En realidad ¿qué queremos expresar con la palabra solidaridad? Pienso que el hecho de una ayuda mutua que no se da por razones de simpatía o conveniencia puntual e un momento, sino porque si yo ayudo al otro, el otro me debe ayudar igualmente. Es una “mano vuelta” como aun persiste en ciertas comunidades pobres, campesina y, a veces, ciudadanas..
Yo he tenido la ocasión de vivir en varias circunstancias de tragedia común: bombardeos, guerra, atentados, un tsunami y terremoto devastador.
En todas estas ocasiones advertí y vivió una especie de quiebre social muy especial. Es como si de repente hubiese caído la separación debida a diferencias de estratos sociales derivados de clases, economía... Parecía como si todos necesitásemos de todos, parecía como sí los vínculos del clan primitivo (por qué no decirlo Tambien: de la “manada primorial”) se recuperasen con inusitada fuerza. En la desgracia común aparecía una energía eufórica un deseo de mutua ayuda en que uno podía ceder pare de lo que hasta ese momento le parecía más necesario para compartirlo con aquel que había perdido todo. Esos instantes se iban diluyendo según el apremio común desaparecía, pero todo s se maravillaban de haberlo sentido y muchos nos preguntábamos por quenseria así siempre.
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